El Holocausto


Una fotografía de la preguerra de tres niños judíos con su niñera. Dos de los niños murieron en 1942. Varsovia, Polonia, 1925-26.

Una fotografía de la preguerra de tres niños judíos con su niñera. Dos de los niños murieron en 1942. Varsovia, Polonia, 1925-26.

— United States Holocaust Memorial Museum

El Holocausto fue la persecución y el asesinato sistemático, burocráticamente organizado y auspiciado por el Estado de aproximadamente seis millones de judíos por parte del régimen nazi y sus colaboradores. "Holocausto" es una palabra de origen griego que significa "sacrificio por fuego". Los nazis, que llegaron al poder en Alemania en enero de 1933, creían que los alemanes eran una "raza superior" y que los judíos, considerados "inferiores", eran una amenaza extranjera para la llamada comunidad racial alemana.

Durante la era del Holocausto, las autoridades alemanas persiguieron a otros grupos debido a su percibida "inferioridad racial": los romaníes (gitanos), los discapacitados y algunos pueblos eslavos (polacos y rusos, entre otros). Otros grupos fueron perseguidos por motivos políticos, ideológicos y de comportamiento, entre ellos los comunistas, los socialistas, los testigos de Jehová y los homosexuales.

En 1933, la población judía de Europa ascendía a más de nueve millones, y la mayoría de los judíos europeos vivía en países que la Alemania nazi ocuparía o dominaría durante la Segunda Guerra Mundial. Para el año 1945, los alemanes y sus colaboradores habían asesinado aproximadamente a dos de cada tres judíos europeos como parte de la "Solución final", la política nazi para asesinar a los judíos de Europa. Si bien las principales víctimas del racismo nazi fueron los judíos, a quienes consideraban el mayor peligro para Alemania, entre las otras víctimas se incluyen 200 mil romaníes (gitanos). Como mínimo, 200 mil pacientes discapacitados física o mentalmente, en su mayoría alemanes y que vivían en instituciones, fueron asesinados en el marco del llamado Programa de Eutanasia.

A medida que la tiranía nazi se propagaba por Europa, los alemanes y sus colaboradores perseguían y asesinaban a millones de otras personas. Entre dos y tres millones de prisioneros de guerra soviéticos fueron asesinados o murieron de inanición, enfermedades, negligencia o maltrato. Los intelectuales polacos no judíos fueron perseguidos y asesinados por los alemanes. Millones de civiles polacos y soviéticos fueron deportados para realizar trabajos forzados en Alemania o en la Polonia ocupada, donde generalmente trabajaban y muchas veces morían en condiciones deplorables. Desde los primeros años del régimen nazi, las autoridades alemanas persiguieron a los homosexuales y a otras personas cuyos comportamientos no se ajustaban a las normas sociales prescritas. Miles de oponentes políticos (incluidos comunistas, socialistas y sindicalistas), así como disidentes religiosos (como los testigos de Jehová), fueron perseguidos por oficiales de la policía alemana. Muchas de estas personas murieron como resultado de la encarcelación y el maltrato.

En los primeros años del régimen nazi, el gobierno nacionalsocialista estableció campos de concentración para detener a oponentes políticos e ideológicos tanto reales como supuestos. En los años previos al estallido de la guerra, los oficiales de las SS y la policía encarcelaban en estos campos a cada vez más judíos, romaníes y otras víctimas del odio étnico y racial. Para concentrar y controlar a la población judía y al mismo tiempo facilitar la deportación posterior de los judíos, los alemanes y sus colaboradores crearon ghettos, campos de tránsito y campos de trabajos forzados para los judíos durante los años de la guerra. Asimismo, las autoridades alemanas establecieron numerosos campos de trabajos forzados, tanto en el denominado Gran Reich Alemán como en territorios ocupados por los alemanes, para personas no judías a quienes los alemanes buscaban explotar laboralmente.

Después de la invasión de la Unión Soviética en junio de 1941, los Einsatzgruppen (equipos móviles de matanza) y más adelante, los batallones militarizados de oficiales de la Policía iban detrás de las líneas alemanas para llevar adelante operaciones de asesinato en masa de judíos, romaníes y oficiales del partido comunista y del estado soviético. Las unidades alemanas de las SS y la policía, con el apoyo de unidades de la Wehrmacht y de la Waffen SS, asesinaron a más de un millón de hombres, mujeres y niños judíos junto con cientos de miles de otras personas. Entre los años 1941 y 1944, las autoridades alemanas del régimen nazi deportaron a millones de judíos desde Alemania, los territorios ocupados y los países de muchos de sus aliados del Eje hacia los ghettos y los centros de exterminio, también llamados centros de la muerte, donde fueron asesinados en cámaras de gas diseñadas especialmente para tal fin.

Durante los últimos meses de la guerra, los guardias de las SS trasladaron a los prisioneros de los campos en tren o en marchas forzadas, también denominadas “marchas de la muerte”, en un intento por evitar que los Aliados liberaran a grandes cantidades de prisioneros. A medida que las fuerzas aliadas se trasladaban por Europa en una serie de ofensivas contra Alemania, empezaron a encontrar y liberar a prisioneros de los campos de concentración, así como a los prisioneros que estaban en el camino en marchas forzadas desde un campo hacia otro. Las marchas continuaron hasta el 7 de mayo de 1945, el día en que las fuerzas armadas alemanas se rindieron incondicionalmente a los Aliados. Para los Aliados occidentales, la Segunda Guerra Mundial finalizó en Europa oficialmente al día siguiente, el 8 de mayo (día V-E), mientras que las fuerzas soviéticas anunciaron su “día de la victoria” el 9 de mayo de 1945.

Después del Holocausto, muchos de los sobrevivientes encontraron refugio en los campos de refugiados que administraban las fuerzas aliadas. Entre 1948 y 1951, casi 700 mil judíos emigraron a Israel, incluidos 136 mil judíos refugiados de Europa. Otros judíos refugiados emigraron a Estados Unidos y a otros países. El último campo de refugiados se cerró en 1957. Los crímenes cometidos durante el Holocausto devastaron a la mayoría de las comunidades judías de Europa y eliminaron totalmente a cientos de comunidades judías de los territorios ocupados de Europa Oriental.

 

 Los niños


Un niño desnutrido come en las calles del ghetto de Varsovia. Varsovia, Polonia, entre 1940 y 1943.

— United States Holocaust Memorial Museum

 

Un niño desnutrido come en las calles del ghetto de Varsovia. Varsovia, Polonia, entre 1940 y 1943.

Los niños eran victimas especialmente vulnerables de los nazis. Es estimado que más de un millón de niños fueron asesinados bajo el gobierno nazi en Alemania y la Europa ocupada.

En los ghettos, muchos murieron por falta de comida, ropa y vivienda. Los nazis consideraban que los niños del ghetto no eran productivos. En general no fueron usados para trabajos forzados, lo que aumentaba sus chances de deportación a los campos de concentración y exterminio. Los niños judíos eran de las primeras victimas cuando los alemanes y sus colaboradores querían destruir una comunidad judía, fusilándolos o deportándolos a los campos de exterminio.

Tras la selección en Auschwitz y otros campos, la mayoría de los niños eran mandados directamente a las cámaras de gas. Otros niños de los campos, especialmente mellizos, eran usados en experimentos médicos de los nazis. También hubo fusilamientos de niños por las SS y fuerzas policiales en Polonia y la Unión Soviética. Los líderes del Consejo Judío (Judenrat) fueron forzados a tomar la decisión, difícil y controvertida, de llenar las cuotas para la deportación de niños. Janusz Korczak, director de un orfanato en el ghetto de Varsovia, se negó a abandonar los niños elegidos para la deportación, y los acompañó en el transporte a Treblinka.

A pesar de la aplastante persecución sufrida en manos de los nazis, muchos niños descubrieron formas de sobrevivir. Muchos niños contrabandeaban comida al ghetto. Algunos participaron en movimientos juveniles activos en la resistencia. Muchos escaparon a campos de partisanos.

Algunas personas no judías ofrecieron lugares para esconder niños y algunas veces como en el caso de Ana Frank, para otros miembros de la familia también. “Kindertransport” (el trasporte de los niños) fue el nombre informal del rescate de miles de niños judíos a Gran Bretaña desde Alemania y los territorios ocupados entre 1938 y 1940. En Francia, casi toda la población protestante del pueblo Le Chambon-sur Lignon escondió niños judíos.

En el período posterior al Holocausto, los refugiados buscaron por toda Europa los niños que se habían perdido. Miles de huérfanos estaban en campos de refugiados. Muchos niños se fueron de Europa oriental como parte del éxodo masivo (Brihah) hacia las zonas aliadas, en camino al Yishuv (el asentamiento judío en Palestina). A través de la Aliyah de jóvenes (la inmigración de jóvenes), miles emigraron al Yishuv, y luego al estado de Israel cuando fue establecido en 1948.

 

 

 

 Las mujeres


Ana Frank a los once años, dos años antes de esconderse con la familia. Ámsterdam, Holanda, 1940.

Ana Frank a los once años, dos años antes de esconderse con la familia. Ámsterdam, Holanda, 1940.

— Anne Frank Stichting

Los nazis tenían los judíos como objetivos para la persecución y la muerte. Pero las mujeres, tanto judías como no judías, eran a menudo sujetas por los nazis a una persecución única y brutal.

Algunos campos y ciertas áreas dentro de los campos de concentración eran designados específicamente para mujeres. En mayo de 1939, los nazis abrieron el campo de Ravensbrueck, el campo de concentración más grande creado para mujeres. Más de 100.000 mujeres pasaron por Ravensbrueck hasta la liberación en 1945. En 1942, un campo de mujeres fue creado en Auschwitz (donde las primeras prisioneras eran las mujeres deportadas de Ravensbrueck). En Bergen-Belsen, un campo de mujeres fue creado en 1944. Miles de prisioneras judías de Ravensbrueck y Auschwitz fueron transferidas a Bergen-Belsen.

Ni las mujeres ni los niños fueron salvados de las operaciones nazis de asesinato masivo. Las mujeres perecieron al lado de los hombres en los territorios soviéticos ocupados por los alemanes, las victimas de los fusilamientos masivos de los Einsatzgruppen (equipos móviles de matanza). Las mujeres, especialmente ellas con niños pequeños, eran a menudo las primeras de ser “seleccionadas” para gaseamiento en los campos de exterminio.

En los ghettos y los campos, los nazis detenían mujeres para realizar trabajos forzados. Los médicos nazis a menudo usaban las mujeres judías y gitanas para experimentos de esterilización y otros experimentos humanos inmorales. En los campos y los ghettos, las mujeres eran particularmente vulnerables al acoso y la violación. Las mujeres judías embarazadas a menudo trataban de ocultar sus embarazos o eran forzadas a hacer abortos.

Algunas mujeres -- como Haika Grosman en Bialystok -- eran lideres o miembros de organizaciones de la resistencia en los ghettos. Otras mujeres participaron activamente en la resistencia armada de los campos. En Auschwitz, Ella Gartner, Regina Safir, Estera Wajsblum, y Roza Robota proveyeron la pólvora que los prisioneros del Sonderkommando usaron para volar una cámara de gas y matar a varios guardias SS en octubre de 1944. Otras mujeres participaron activamente en las operaciones de ayuda y rescate de los judíos en la Europa ocupada. Entre ellas, la paracaidista judía Hannah Szenes y la sionista Gisi Fleischmann, cuyo Grupo Trabajador (Pracovna Skupina) intentó parar las deportaciones de judíos de Eslovaquia.

 

Historia personalFotografía

 

 

Los ghettos

 


Un cartel, en alemán y latvio, advirtiendo que personas que intentan atravesar la reja o contactar habitantes del ghetto de Riga serán fusiladas. Riga, Latvia, 1941-1943.

— United States Holocaust Memorial Museum

Un cartel, en alemán y latvio, advirtiendo que personas que intentan atravesar la reja o contactar habitantes del ghetto de Riga serán fusiladas. Riga, Latvia, 1941-1943.

El termino “ghetto” viene del nombre del barrio judío de Venecia, establecido en 1516. Durante la Segunda Guerra Mundial, los ghettos eran distritos urbanos (de menudo cerrados) en los cuales los alemanes forzaron a la población judía a vivir en condiciones miserables. Los ghettos aislaban a los judíos, separándolos de la población no judía así como de las otras comunidades judías. Los nazis crearon más de 400 ghettos.

Los alemanes consideraban la creación de los ghettos como una medida provisoria para controlar y segregar a los judíos. En varios lugares, los ghettos duraron poco tiempo. Con la implementación de la “Solución Final” en 1942, los alemanes sistemáticamente destrozaron los ghettos y deportaron los judíos a los campos de exterminio donde fueron asesinados. Algunos judíos fueron deportados desde los ghettos a campos de trabajo forzado o campos de concentración.

La mayoría de los ghettos (ubicados principalmente en la Europa oriental ocupada por los nazis) estaban cerrados con muros, rejas de alambre de púas, o portones. Los ghettos eran extremamente insalubres y estaban atestados. El hambre, la escasez crónica, los inviernos duros, y la falta de servicios públicos resultaron en brotes epidémicos y una alta mortalidad.

El ghetto más grande en Polonia era el ghetto de Varsovia, donde aproximadamente 450.000 judíos fueron hacinados dentro de un área de 1.3 millas cuadradas. Otros ghettos importantes eran los de Lodz, Krakow (Cracovia), Bialystok, Lvov, Lublin, Vilna, Kovno, Czestochowa, y Minsk.

Los nazis exigían a los judíos usar insignias o brazales que los identificaban como judíos y también que muchos hicieran trabajos forzados para el gobierno alemán. La vida cotidiana en los ghettos fue administrada por los consejos judíos (Judenraete), cuyos miembros eran nombrados por los nazis, y la policía judía, que fue forzada por los alemanes a mantener orden dentro del ghetto y a facilitar las deportaciones a los campos de exterminio.

Actividades ilegales – como contrabandear comida o armas, hacerse miembro de un movimiento juvenil, o asistir eventos culturales – ocurrían frecuentemente sin la aprobación de los consejos judíos (aunque en muchos casos el consejo judío sí patrocinaba actividades culturales).

En algunos ghettos, miembros de la resistencia judía organizaron insurrecciones armadas. La más grande fue la sublevación del ghetto de Varsovia en 1943. También hubo rebeliones violentas en Vilna, Bialystok, y Czestochowa, y varios otros ghettos más pequeños. En agosto de 1944, los nazis completaron la destrucción de Lodz, el ultimo ghetto importante.

En Hungría, la creación de los ghettos no empezó hasta la primavera de 1944, después de la invasión y ocupación alemana del país. En menos de tres meses, la policía húngara, en coordinación con los alemanes, deportó casi 440.000 judíos de los ghettos húngaros. La mayoría fueron mandados a Auschwitz-Birkenau. En Budapest, los judíos fueron confinados a casas marcadas (llamadas casas de la estrella de David). En noviembre, después de un golpe patrocinado por los alemanes, el partido fascista húngaro estableció formalmente un ghetto en Budapest. Alrededor de 63.000 judíos fueron confinados en un área de 0.1 milla cuadrada. Los 25.000 judíos con pasaportes protectivos (emitidos por países neutrales) fueron puestos en un ghetto “internacional” en otra sección de la ciudad. En enero de 1945, las fuerzas soviéticas liberaron Budapest y los judíos húngaros que estaban en los ghettos.

 

 Los campos nazis
 

 


Prisioneros haciendo trabajos forzados. La fotografía fue tomada durante una inspección de las SS. El campo de concentración de Dachau, Alemania, el 28 de junio de 1938.

— Bildarchiv Preussischer Kulturbesitz

 

Prisioneros haciendo trabajos forzados. La fotografía fue tomada durante una inspección de las SS. El campo de concentración de Dachau, Alemania, el 28 de junio de 1938.

Los alemanes crearon una serie de instalaciones de detención para encarcelar y eliminar a los “enemigos del estado.” La mayoría de los prisioneros en los primeros campos de concentración era comunistas alemanes, socialistas, social demócratas, romas (gitanos), testigos de Jehová, homosexuales, clérigos cristianos, y personas acusadas de comportamiento “asocial” o anormal.

Después de la anexión de Austria en marzo de 1938, los nazis arrestaron judíos alemanes y austriacos y los encarcelaron en los campos de Dachau, Buchenwald, y Sachsenhausen, en Alemania. Después de los pogroms de Kristallnacht en noviembre de 1938, los nazis llevaron a cabo arrestos masivos de hombres judíos y los encarcelaron en campos por periodos breves.

Equipos especiales de las SS llamados “Unidades de la calavera” (Totenkopfverbände) vigilaban los campos, y competían unos con otros en crueldad. Durante la Segunda Guerra Mundial, médicos nazis hacían experimentos sobre los prisioneros de algunos campos. Bajo el impacto de la guerra, el sistema de campos nazis creció rápidamente. Después de la invasión alemana de Polonia en septiembre de 1939, los nazis abrieron campos de trabajos forzados donde miles de prisioneros murieron de agotamiento y hambre.

Después de la invasión alemana de la Unión Soviética en junio 1941, los nazis aumentaron el numero de campos de prisioneros de guerra. Algunos de los campos fueron construidos dentro de campos de concentración ya existentes, como en Auschwitz en la Polonia ocupada. El campo de Lublin, luego conocido como Majdanek, fue creado en el otoño de 1941 como un campo de prisioneros de guerra y fue convertido en campo de concentración en 1943. Miles de prisioneros de guerra soviéticos fueron fusilados o gaseados ahí.

Para facilitar la “Solución Final” (el genocidio de los judíos), los nazis abrieron campos de exterminio en Polonia. Chelmno, el primer campo de exterminio, abrió en diciembre de 1941. Ahí los judíos y romas fueron gaseados en camiones. En 1942, los nazis abrieron Belzec, Sobibor, y Treblinka para asesinar sistemáticamente a los judíos del Gobierno General (el territorio en el interior de la Polonia ocupada).

Los nazis construyeron cámaras de gas para aumentar la eficiencia del proceso y para hacerlo más impersonal para los verdugos. En Auschwitz, el campo de exterminio de Birkenau tenía cuatro cámaras de gas. Al culminar las deportaciones, hasta ocho mil judíos fueron gaseados cada día.

Los judíos en los territorios ocupados por los nazis eran a menudo primero deportados a campos provisionales, como Westerbork en Holanda, o Drancy en Francia. Los campos provisionales eran usualmente la ultima parada antes de un campo de exterminio.

Bajo la dirección de las SS, los alemanes mataron más de tres millones de judíos en los campos de exterminio de la Polonia ocupada.